jueves, 15 de agosto de 2013

Eloy Reverón...Documentos fundamentales para el estudio de la historia de la masonería inglesa.


Tomado del libro: Los Herederos de las Guildas (Masonería Rituales y Cofradías), Caracas, Instituto Venezolano de Estudios Masónicos IVEM, 1995, 148 p. de sus páginas 18-25 (Identificado como lectura n 1 para el seminario La Masonería y la Independencia, Escuela de Historia, UCV, Caracas, Venezuela semestre impar 2013)

Sin embargo, existe una concepción temporal e histórica de la definición de las legendarias guildas de constructores, que los masones británicos han encontrado como testimonio de su existencia, lo difícil hasta ahora es pensar con seguridad en un vínculo más tangible de continuidad con estas antiguas cofradías: "Throughout the whole of it (the period 1390 to 1646), there is no evidence of living Freemasonry in South Britain. By this, I mean that there are no lodge minutes or records, so we have no evidence from any source whatever wicth will reduce to actual demonstration that there were Free and Acepted Masons who sat in South Britain before 1646. (I. R.F. “Gould English Masonry before the Era of Grand Lodge”. Citado por A.C.F. Jackson en A.Q.C., N 89, p. 23)

Si hacemos un recorrido por los documentos esenciales de la Masonería inglesa, que nos sirvan como referencia del vínculo existente entre las guildas de obreros operarios que se transformaron en una masonería de burgueses y aristócratas, inspirados en las tradiciones de los constructores y sus enseñanzas herméticas, políticas y religiosas encontramos que, existen escasos indicios acerca de la existencia de masonería inglesa entre los siglos XIV y XVII; sin embargo A. Cosby F. Jackson encontró suficientes razones para mostrar que algunos de esos albañiles, fueron hombres con cierta educación y habilidades, y que especialmente de aquellos que tenemos noticias, vinieron principalmente de la clase media y clases superiores. Pero no descarta la posibilidad de la existencia de otros de inferior estrato social, que seguramente por ser analfabetas, no dejaron huella. El conocimiento del marco histórico referencial que el autor maneja, le ha permitido establecer relaciones con ese trasfondo cotidiano, para preguntarse, porqué los hombres educados se hicieron masones. Según sus apreciaciones no hubo masones no operativos durante este período, señalando incluso que alguna conexión con los masones operativos resulta incidental. Entre las razones que sugiere están la afición por la arquitectura, curiosidad por las antigüedades, el deseo de un lugar para reunirse en paz durante tiempos difíciles o convulsionados. Jackson hace referencia a la historia de J.M. Trevelyan de quien resume la siguiente observación: "Las controversias de la política eclesiástica del momento, en el cual todas las partes apelaron a las prácticas del pasado, fijaron su interés en la investigación histórica... esto inspiró la búsqueda de clérigos y religiosos seglares igualmente... la publicación de textos medievales, y el estudio de la arquitectura medieval anglosajona por estos hombres entre 1660 y 1730 que fue igualmente sorprendente en calidad y volumen." (A.Q.C. N 89, 1976 p. 30)

Estas razones pudieron haber incitado a los hombres educados a unirse a la Masonería, pero la pregunta que coloca sobre el tapete es: ¿Qué los indujo a continuar en ella?. Piensa Jackson que estos masones no operativos educados fueron tratados de diferente manera por los iletrados operativos. Hace otra referencia al historiador masónico F. Gould, quien señaló que Elías Ashmole pudo haberse hecho masón de manera confidencial, según lo prescrito por las antiguas ordenanzas. Resalta la idea con respecto a las antiguas ordenanzas y su irrealista y tradicional historia, con sus exhortaciones y designios para el trabajador medieval, tales como no tratar con violencia a la esposa, y no desear a la hija o a la sirvienta de manera impía, o no jugar cartas o dados, podría haber parecido a un hombre como Ashmole, Mainwarring, o Randle Holme III, o a un comerciante de clase media, tan ridículo como hoy en día podría parecernos a nosotros. Sin embargo queda un asunto sin resolver, y puede ser que nunca se resuelva, es si hubo algún contenido esotérico o simbólico de naturaleza seria en las ceremonias del período operativo, que no sólo pudieron haberse producido en una atmósfera muy diferente de la que encontramos en cualquier reunión contemporánea de profanos, concluye Jackson señalando que no encontró evidencia de alguna tradición esotérica a mediados del siglo XVII en la francmasonería.( A. Cosby. F. Jackson, "Our predecessors, The English Non Operative Masons of de Mid 17th Century" en A.Q.C. vol 89, Londres, 1976, pp. 23-31.)

El documento masónico inglés de mayor relevancia es conocido como El Manuscrito Regio(Diccionario Enciclopédico de la Masonería de Frau Abrines ofrece una traducción abreviada.) Este valioso testimonio de la Masonería operativa se mantuvo traspapelado durante mucho tiempo en la biblioteca del rey Jorge II, quien lo donó al Museo Británico en 1751, donde también se mantuvo ignorado hasta 1840, cuando James Orchard Halliwell se dio cuenta de que se trataba de algo más que un simple manual de geometría. Treinta y seis años más tarde, los investigadores masones de la logia Arts Quatour Coronati de Londres, F.T. Gould y W.J. Hughan lo estudiaron. Así comenzó un período de reformulación del conocimiento que los masones ingleses tenían de sus antecesores de las guildas. Al observar estos versos, que contienen leyendas y reglamentos de vida práctica, que en nada se relacionan con grandes y pequeños misterios, o las prácticas esotéricas iniciáticas que la Masonería moderna contempla en sus enseñanzas. Así podemos pensar que la Masonería Especulativa adaptó enseñanzas esotéricas en relación con el simbolismo de los instrumentos de construcción, en tiempos posteriores a 1717. O en su lugar la hipótesis que plantean los hermanos chilenos de la logia de investigación "Pentalpha" N 119, quienes señalan " No puede haber duda, que la Masonería simbólica o especulativa, tiene dos afluentes distintos: uno práctico, pragmático, y otro esotérico. El poema regio pertenece al primero, al afluente pragmático y no tiene contenido o vestigios esotéricos." (Temas Masónicos N 2 , Recopilación de Trabajos publicados por el I:.H:. Francisco Sohr, s-f, p.141)

También conocido como el manuscrito de Halliwell es el documento más antiguo que han encontrado de la Masonería de las guildas que pueda ser relacionado con la moderna Masonería especulativa, el cual es contemporáneo a los Cuentos de Canterbury, y data de 1390-1420. Da la primera mención de una logia de masones en un documento escrito: The Regius Manuscript (El original reposa en The British Library, Bibl. Reg. 17. A.I. Citado por Cosby Jackson, " The Medieval Masons of the Regius Manuscript. (Our Predecessors)".( Transactions of Quatour Coronati Lodge N 2076 Vol 88 for the year 1975, Oxford, Alden Press, 1976, p.17) Este pergamino fue hallado por el anticuario Halliwel en el Museo Británico de Duover. " Este documento contiene bajo el título de Hicincipiunt constitutions artis Geometriae secundun Euclidem, Aquí comienzan las constituciones del Arte de la Geometría según Euclides, setecientos noventa versos en inglés antiguo; y presenta, en primer término, la antigua tradición de la corporación, la cual nos da a conocer la vida cotidiana de los masones medievales; y en seguida dividido en dos partes, los quince artículos de la ley, aumentados con quince puntos de ampliación. (...) relata la leyenda de los cuatro Coronados, que se encuentra también en los estatutos alemanes, que puede ser considerado como la prueba evidente de la identidad de los tallistas de piedra o canteros ingleses y alemanes y de su origen común." (Diccionario Enciclopédico de la Masonería, Frau y Abrines, p. 32.)

La geometría es considerada la séptima de las artes liberales, arte que según el manuscrito llegó a Inglaterra en los tiempos del rey Athestan, quien gobernó entre los años 924 a 940, período durante el cual impulsó la construcción de casas e iglesias. La categoría de estos trabajadores estaba por encima de la de súbditos o siervos, debían llamarse queridos hermanos.

Antes de comentar algunos aspectos sobre este manuscrito Maurice Colinon señala que: " Los masones, desde hace siglos, han procurado descubrirse antecesores de los cuales pudieran sentirse orgullosos. Se llenaría una vasta biblioteca reuniendo nada más que las obras que pretenden demostrar la filiación de la Masonería con la Rosa-Cruz, el hermetismo, el kabalismo, la alquimia, las sociedades de iniciación egipcias, griegas o judías, la triada secreta de la antigua China. Los Collegia fabrorum romanos, la caballería de las Cruzadas o de la destruida Orden de los templarios, etc. "( Maurice Colinon en: La Iglesia frente a la Masonería. Buenos Aires, Ed. Huemul, 1963, p. 16.)

Para los primeros historiadores de la Masonería, el primer masón fue Adán "E.l .F:. Bèdarride, gran conservador de la Orden, revela por su parte que: El patriarca Adán, fiel a las instrucciones que había recibido del Altísimo, formó la primera logia con sus hijos, quienes lo secundaron poderosamente trabajando por sus medios para la propagación del arte que profesamos."( Maurice Colinon Op.Cit p.14), la hoja de parra posiblemente era su mandil. Colinon reconoce que estas imaginaciones delirantes hacen sonreír a los masones de nuestro tiempo, y que a pesar de que el historiador Albert Lantoine las "había ejecutado en su Historia de la Masonería Francesa no deja de atestiguar la mentalidad esotérica que ha presidido durante largo tiempo los trabajos de las logias".( Maurice Colinon, Ob.Cit. p. 15.) Sin embargo, existe otro punto de vista simbólico donde Adán representa al primer hombre racional, capaz de sostener el techo mediante el uso de la columna.

El Manuscrito Regio nos muestra la relación entre los operarios y los masones modernos. La forma como recibieron esta herencia, parece ser el secreto que no se ha podido revelar. Los comentarios de este historiador francés sobre el manuscrito regio señalan: " El manuscrito Regius, que data de alrededor del año 1400, acepta una tradición según la cual la Orden habría sido creada en Egipto. El Manuscrito de Cooke, ligeramente posterior, hace intervenir personajes bíblicos: Jabal, Jubal, Tubal, como también a Pitágoras y a Hermes. La noción de una tradición egipcia, más o menos helenizada después, se encuentra en casi todos los masones de la Edad Media."( Ídem.) Este autor da por hecho que existían numerosas logias desde el siglo XIII que ya tenían un carácter internacional. En 1275 se reunió, para la culminación de la catedral de Estrasburgo, un congreso de maestros albañiles provenientes de Inglaterra, Alemania, y Lombardía, los cuales se constituyeron en Gran Logia. Habla de masones que recibían una iniciación profesional y espiritual: " Porque para ser masón no bastaba ser hábil, había, además, que ser digno." (Ídem.)

El pasaje más importante del manuscrito, según los especialistas, lo constituye La Nueva Ordenanza del Arte de la Geometría. El secreto esencial de los masones operativos. Sobre la base de todo lo expresado llegamos a pensar que la tradición esotérica de la Masonería moderna, puede ser el resultado de la investigación e interpretación de las obras de la arquitectura sagrada, y la especulación interpretativa de la tradición bíblica en los aspectos en que esta se relaciona con la necesidad de construir en el microcosmos, la armonía que revela la observación de la bóveda celeste. Por eso es que Henry Clausen señalaba que la enseñanza de la Masonería era más antigua que su organización.

Luego le sigue el manuscrito conocido como The Índigo Jones Manuscript que corresponde al año 1607. Se trata de una hermosa pieza presentada en forma de libro, de 15 pulgadas por 9 y media. La pieza total contiene 25 páginas escritas por una sola cara y finalmente 20 en blanco, como si hubiese quedado algo pendiente por copiar.

Los especialistas piensan que las cintas y la fina caligrafía evidencian que fue elaborado por encargo de algún noble o persona importante.

En el momento de su aparición suscitó muchas dudas con respecto a su autenticidad y su antigüedad. Está fechado en la página frontal en 1607, y con el nombre de Índigo Jones, Delin. Es posible que la portada perteneciera a otra pieza más antigua, y le fuera agregada con posteridad. En 1881 este manuscrito fue publicado por el hermano Woodford en la Masonic Magazine del mes de julio donde señaló: "Esto es, presumimos, bastante cierto que perteneció a Índigo Jones. Fechado en 1607" (A.Q.C., Vol 88, 1976, p. 111) Las dudas que señalábamos surgieron en tres aspectos; el primero, si realmente perteneció a Índigo Jones; segundo, si él dibujó la portada; y el tercero, si la fecha colocada fue la correcta.

Índigo Jones nació en 1573, estudió en Italia y regresó a Inglaterra en 1605, hasta su muerte en 1653 estuvo vinculado con lo mejor y lo más noble de ese país. El trabajo, como hemos señalado pudo ser un encargo elaborado con sus manos. Sin embargo detalles y deficiencias en el dibujo de la portada, suscitan dudas de que hubiesen sido producto de la mano de un arquitecto de su categoría. Especialistas como F.C. Price señalan que el trabajo data de 1760.

En comparaciones con otros escritos posteriores, han encontrado errores similares en algún punto del documento, y por ese detalle han dudado de su antigüedad, posiblemente fue hecho en 1665, dos años después de la muerte de Índigo Jones. Lo curioso es que en el documento se habla del Maestro Hiram Abiff, héroe de la leyenda del grado tercero dada a conocer en 1724.

Las pruebas que de la tinta, revelaron que la fecha fue escrita con otra tinta diferente al resto del documento, vale decir, que el texto fue escrito a mediados de 1700, y el dibujo a 1607. Por lo tanto puede considerarse un texto de la Masonería especulativa.( A.Q.C. Vol 88, 1976 pp. 111-114)

The Wood Manuscrip (1610) Es otro suntuoso manuscrito de las "Antiguas Constituciones", elaborado en 16 hojas y 32 páginas de 9 pulgadas por 6 y un cuarto. Perteneció a un caballero de apellido Wood por más de 20 años, luego de pasar por varios dueños llegó a la biblioteca masónica de Worcester.

La fecha de 1610 no fue cuestionada, lo que trajo dudas fue la intención del documento, vale decir, que su reproducción fue más con fines de anticuario, que para el uso de las logias, sin descartar que pudieron darle ese uso.También quedó descartada la intención de haber sido una copia para llevarla a la imprenta, porque el papel usado es de muy bella confección y de elevado costo para tales propósitos. Sin embargo, los editores de A.Q.C. señalan que se trata de una copia hecha por un coleccionista de antigüedades, de quien es necesario hacer más investigaciones. Todo el texto acusa las características de la familia de la Gran Logia, y por eso fue incluido en los textos del hermano Woodford en Masonic Magazine de junio de 1881, y en los Old Charges, 2a edición del hermano Hughan.

Fue en A.Q.C. vol 88 de 1976, donde se publicó la versión facsimilar completa de este interesante texto, fuente también para nuestros comentarios acerca de este preciado documento.

El Libro de las Constituciones de Anderson (1723). Es el documento fundamental para la historia de los masones especulativos. La primera pieza de ordenamiento jurídico de la Masonería Especulativa. En el Libro de las Constituciones de Anderson Justifican la ausencia de documentos relativos al período de la Masonería operativa, con un incendio de los archivos. Así tenemos que el texto no fue elaborado por los masones operarios. De tal manera nos encontramos ante una masonería histórica, frente a otra legendaria: "En los anales masónicos se dice haberse quemado en 1720(Siendo Gran Maestre Payne) varios antiguos manuscritos para prevenir que pudieran caer en manos extrañas" (Manual del Compañero Masón, Buenos Aires, 1950, p 24). Al parecer no fue que hubo un incendio, sino que lo quemaron adrede. El Libro de las Constituciones sigue la senda de la historia de la arquitectura hasta confundirla con la historia de la Masonería. La diferencia es muy sutil, y podemos hasta descartar el error, al confundirlas porque vienen por el mismo sendero de la Historia.

Desde el punto de vista histórico y jurídico, me inclino a considerar la Constitución de Anderson como el acta de nacimiento de la Masonería moderna, la Carta Magna que le da forma, el primer ordenamiento jurídico de los masones modernos. Sin embargo no debemos perder de vista, algo importante, la versión "histórica" que ofrece del origen de la Masonería y los misterios de su nacimiento, que se asemejan a los enigmas del ave zancuda que traía a los recién nacidos pendientes de su pico con respecto al origen de la vida. Aunque como hemos señalado, reiteramos, es este documento el primer ordenamiento jurídico de la orden, lo observamos como documento histórico, pero guardando cuidado de su versión de lo que consideraron la Historia de la Orden en ese mismo documento. Vale decir, que por ser el documento histórico, no implica necesariamente que la versión que da de la historia de la Masonería, sea por consecuencia veraz.

Lo consideramos como el documento fundamental para la historia de la Masonería en su relación con la Masonería Especulativa, este lo constituye sin duda The Cosntitutions of Free-Masons, containing the History, Charges, Regualtions, ... of the most Ancient and Right Worshipful Fraternity, Londres, 1723. Conocida en castellano como el "Libro de las Constituciones de Anderson".

Otro aspecto que lo realza radica en cuanto a la Carta Magna, que regula el aspecto ideológico de la Orden, se hace necesario advertir e insistir en su parte doctrinal y jurídica como lo esencial, porque ofrece la versión de la Historia de la Institución que sus autores: " Anderson y Desaguliers, dan de los orígenes de la Masonería, y que incide en el terreno de lo imaginativo."( José Antonio Ferrer Masonería Iglesia e Ilustración p. 293.) El contenido histórico al cual se refiere Ferrer está vinculado a la parte referida,a la versión que ofrece de los orígenes de la Masonería. En cuanto a lo demás, repetimos, es el primer ordenamiento jurídico de la Masonería especulativa, dice mucho en cuanto a la génesis de la Masonería histórica, con respecto a la parte que corresponde a la historia de los masones aceptados, aquellos elementos ajenos al arte de la construcción, que por primera vez ingresaron a la Orden.

Finalmente tenemos la pieza conocida como The Lechere Manuscript del cual los especialistas calculan su elaboración con fecha posterior a la segunda Mitad del Siglo XVII. Se le conoce con ese nombre porque fue Sir Edmund A. H. Lechemere, Gran Maestro de la Provincia de Worcester, quien lo descubrió y lo donó a la biblioteca masónica de Worcester para su custodia y restauración.

Lo constituyen, tres páginas sueltas y unidas con hilo, las cuales no parecen haber sido arrancadas de un libro mayor, y con la salvedad, que las tres hojas son de diferentes tamaños.

La caligrafía no puede ser considerada como un espécimen bonito, contiene partes mutiladas e ilegibles, con correcciones e interpolaciones elaboradas con posterioridad a la elaboración del escrito, y su antigüedad data del siglo XVII, su texto fue publicado por primera vez en diciembre de 1882 en la revista Masonic Monthly.

En cuanto a su contenido resume relaciones de la Orden, con leyendas bíblicas de Abraham y su esposa Sara, y su viaje a Egipto, donde supuestamente aprendieron las ciencias liberales, sin embargo no deja de ser muy útil para la comprensión de la Masonería moderna. 


Por; QH.·. Eloy Reverón. Profesor de la Escuela de Historia de la Universidad Central de Venezuela.

No hay comentarios:

Publicar un comentario